Cambiar tu vida
Por lo general, hay algún catalizador (o varios de ellos) que lleva a alguien a la decisión de que algún cambio serio está cerca. Desafortunadamente, es fácil vivir con estas señales durante mucho tiempo antes de darse cuenta de lo que están tratando de decir. La clave para entender lo que está pasando en nuestra vida es reconocer cómo nos sentimos. Si nos sentimos ansiosos, descontentos o amargados, podría ser la forma en que nuestro cuerpo nos diga que es hora de probar algo nuevo.
AQUÍ HAY 10 SEÑALES QUE PUEDEN INDICAR QUE ES TIEMPO DE CAMBIAR TU VIDA:
1. TE SIENTES MAL AL PENSAR EN IR A TRABAJAR.
Gran parte de nuestro día y semana se pasa en el trabajo, esa sensación de pavor cuando te despiertas o cuando el fin de semana se acerca es una señal segura de que algo no está bien. Tómate un tiempo para averiguar qué es lo que temes de tu día en el trabajo y diseña un plan para cambiarlo.
2. ESTÁS VIVIENDO EN EL PASADO O ESTÁS SOÑANDO SOBRE EL FUTURO.
Enfocarse en tiempos mejores, ya sea del pasado o el futuro, podría ser una señal de que estás tratando de escapar del presente. No es raro soñar con una vida mejor y soñar puede ser bueno. Pero es cuando el sueño toma el lugar del presente cuando existe un problema.
3. LA GENTE ESTÁ CONSTANTEMENTE DICIENDO QUE TE RELAJES.
Si el mismo mensaje sigue apareciendo de amigos y conocidos por igual, tal vez sea el momento de averiguar qué hay detrás de él. «Necesitas relajarte» es el argot de «supéralo» en el mundo de hoy. Así que cuando lo oímos una y otra vez, probablemente nos estamos aferrando a algo que necesitamos dejar ir.
4. ESTÁS CELOSO DE LOS ÉXITOS DE OTROS.
Los celos son una señal de descontento con nuestra vida y no tienen nada que ver con el logro de otras personas. Es difícil ser feliz por los éxitos de otras personas cuando nos sentimos atrapados en nuestra vida. Es hora de preguntarnos qué es lo que nos dicen los celos.
5. TE DESPIERTAS CANSADO.
Despertar cansado es una señal de descontento, no necesariamente con el trabajo sino con la vida en general. Es difícil descansar adecuadamente con preocupación y angustia en nuestras vidas. Cuando vivimos en un estado constante de cansancio, puede significar lucha continua en nuestra vida. También indica que estamos cansados de luchar y estamos dispuestos a admitir la derrota. En lugar de rendirse, piensa en lo que puedes hacer para volver a encarrilar la situación. La vida está destinada a ser vivida feliz y la felicidad no es cansada.
6. ESTÁS INQUIETO.
La sensación de la necesidad de hacer algo o de ir a algún sitio es una clara señal de que la creatividad está siendo sofocada, y algo debe cambiar. La incapacidad para estar contento y estar sentado quieto puede sugerir que hay algo más que se supone que tienes que hacer. Si estás inquieto, es tu trabajo descubrir lo que tu cuerpo te está diciendo.
7. COTILLEAS.
El chismear o cotillear es una manera de desviar el cambio que necesitamos hacer en nuestras vidas hacia alguien más. Cuando nos encontramos chismorreando, es importante preguntarnos qué estamos evitando en nuestra vida y luego darnos cuenta de que enfrentarlo es lo mejor que podemos hacer.
8. TIENES UN SENTIDO CONSTANTE DE MALOS PRESAGIOS.
Esperar a que algo malo suceda eventualmente conducirá a que algo malo suceda en realidad. Detén la preocupación y las predicciones y empieza a concentrarte en lo que estás haciendo ahora mismo.
9. TE ENCUENTRAS PENSANDO: «TIENE QUE HABER ALGO MÁS QUE ESTO».
Pensar que hay algo más o algo más grande suele significar que hay nuevas oportunidades en el horizonte. Mantente abierto a las cosas que están despertando la pasión y la creatividad y síguelas. El destino probablemente sabe exactamente lo que necesitas.
La decisión de hacer cambios puede ser inmediata, pero el cambio en sí mismo no siempre ocurre tan rápido. No dejes que eso te impida seguir adelante. Incluso los pasos más pequeños pueden ayudar a reducir los sentimientos negativos y mantener alta la motivación para el cambio.
Lo importante es hacer algo ahora mismo, porque tus únicas opciones son aceptar el cambio o aceptar las cosas como son.
De cualquier manera, es importante que prestemos atención a cómo nos sentimos y hagamos más de lo que nos hace sentir bien.
«Debemos dejar ir la vida que tenemos planeada, para aceptar la que nos espera«.